Baguette T65
DÍAS DE ELABORACIÓN
En amarillo los días que se elabora.
El pan común, a menudo erróneamente etiquetado como "blanco", continúa siendo el soberano entre los panes en la mayoría de las panaderías. Su corteza dorada y crujiente añade un toque apetitoso.
A pesar de las críticas infundadas de la última década, sigue siendo la elección favorita de la mayoría de los consumidores. Su versatilidad lo hace idóneo para cualquier acompañamiento y su agradable sabor nunca deja de complacer.
Durante mucho tiempo, fue considerado el pan de la nobleza y los afortunados, gracias a su pureza y ligereza incomparables.
CÓMO LO ELABORAMOS
Elaboramos nuestro pan común con una buena harina T65 que proviene de diferentes variedades de trigos europeos.
El amasado es moderado para disminuir lo máximo posible el blanqueamiento de la miga y pérdida de sabor del pan.
Utilizamos un método de fermentación indirecto añadiendo masa fermentada.
Fermentación de muchas horas a baja temperatura.
QUÉ APORTA NUESTRO PAN
Aporta glúcidos complejos y fibras, necesarios para el buen funcionamiento de nuestro organismo.
Es un pan « no tan blanco » ya que utilizamos una harina T65, es decir con más fibras que un T55 clásico, concretamente un 3%. Esto supone una cantidad mayor de la obtenido de la gran mayoría de frutas.
Es el pan que a todo el mundo gusta, por su sabor más plano y es también el más polivalente ya que se combina con todos los platos y a cualquier hora.
La utilización de masa fermentada, una fermentación muy larga así cómo la no utilización de ciertos aditivos que secan el pan, mejoran su sabor, su coloración y su conservación respecto a otros panes « blancos » que hay en el mercado.